Profesor Guillermo Cesar Vadillo
  EN LA BUSQUEDA DE UN CAMBIO
 
EN LA BUSQUEDA DE UN CAMBIO
 
       Nací en el año 1933 en esos tiempos se vivía en una Argentina potente reconocida por el mundo, eran momentos donde nos llamaban el granero del mundo, nuestra cultura y educación era reconocida, muchos intelectuales y artistas ocupaban lugares destacados en el concepto mundial. Siendo yo, aún muy joven comenzó en el país su decadencia que se fue acelerando hasta llegar a nuestro días en donde alcanzó su mayor grado. Voy a tomar distintas situaciones que han  acontecidos que demuestran lo que expreso.  
        Desde su comienzo en la política los Kirchner han acumulado un poder gigantesco en la Argentina , no solamente mediante el saqueo liso y llano de los caudales públicos, sino a través de una importantísima concentración de resortes económicos en sus manos, protegido por testaferros y cómplices de toda laya, que todos los días les generan más dinero. 
      Mediante la formación de grupos juveniles anuncian la posible violencia en las calles, para protegerlos  frente a cualquier oposición ciudadana, con esta decisión han conseguido que se produzcan  enfrentamientos en distintas áreas; piqueteros contra piqueteros, sindicalistas contra sindicalistas, empresarios contra empresarios, clases medias contra clases bajas, etc.,
      Si alguna vez finalizara su gobierno, dejarán tierra arrasada y  minada para que le exploten a su sucesor. Para que se cumplan sus designios se aprovecha, la  inacción social, producida por la  falta de reacción de la gente sobre los ataques a la República y a la democracia. Hoy la Justicia ha perdido su gran valor en la sociedad, se   sojuzga y amedrenta a los jueces que no aceptan las dádivas oficiales  o se nieguen a la voluntad de la Presidenta.
      El pueblo no reaccionó ante la impudicia con que se manejó el tema de los dineros de Santa Cruz, tampoco al costo criminalmente incrementado de las obras públicas, ni a la corrupción que estalló con Skanka, ni a la disparatada política internacional que nos ha llevado a aliñarnos con lo peor del mundo, como   los negociados con Venezuela, o a la impúdica demostración de riquezas la familia Kichner. Tampoco reaccionó frente al vertiginoso crecimiento patrimonial de empresarios adictos y de los funcionarios cercanos al poder, al asesino tráfico de medicamentos falsos que vincula al oficialismo y los sindicatos. Los cargamentos de cocaína transportados por una línea aérea oficial quedan en el más absoluto silencio. Las actitudes prepotentes de Guillermo Moreno y su violación a las estadísticas por parte del INdEC. Continua la estafa a los jubilados y también la confiscación de los ahorros privados en las AFJP’s para servirse de sus fondos para manejos espureos..
   Tampoco se reaccionó cuando  Néstor Kirchner decidió destruir al campo, ni cuando reemplazó a las Fuerzas Armadas por elementos de combate integrados por distintas agrupaciones políticas, inspiradas en el maoísmo y en el trostskysmo, dispuestas a defender su absurdo “modelo”.
   El gobierno esta ausente ante el crecimiento geométrico de la pobreza y la indigencia. Insulta a la inteligencia colectiva desde el atril, cuando nacionaliza a Aerolíneas Argentinas o cuando expropia YPF y le destina fondos imprescindibles para alimentar a los más excluidos, sin tener fondos necesarios  para la explotación de estos yacimientos  Vivimos un atentado permanente contra nuestras más elementales libertades cuando declara la guerra a los medios críticos.
  Se comprobó la usurpación de título por la Presidenta  y junto a su hija   viajan muy orondas por el mundo o le pone a su disposición el avión presidencial para que la lleven a fiestas privadas. Hace caso omiso  a la crítica de la prensa internacional cuando habla de la corrupción en su gobierno.
    Se violan contratos privados para que haya fútbol  o  competencias automovilísticas  “gratis  para todos” que cuesta cifras siderales por año. Se falsea un requerimiento unánime del subsidio universal a la niñez para montar un mayor aparato clientelista.
   El delitoque impera en el país impide a muchos habitantes del Conurbano   a salir de sus casas, pues el riesgo de morir asesinados, aún después de entregar todo a los ladrones, es muy alto. Una Ministra de Seguridad que en sus épocas jóvenes fue parte del delito, hoy mira para otro lado cuando ve la difícil situación que vive la ciudadanía y solo se contenta con expresar que la “inseguridad es una sensación”.
   En su reelección la Presidenta elige en el más absoluto secreto a un personaje siniestro quien públicamente actúa como el bufón de la mandataria, pero en su segunda personalidad es un hombre inescrupuloso,  dueño de la empresa Ciccone Calcográfica que  imprime  500 millones de billetes de 100 pesos y que le dejara una cuantiosa fortuna, en sus turbios negociados goza de las más absoluta impunidad y protección de la Presidenta. Con esta emisión descontrolada la inflación que ya se esta sufriendo alcanzará cifras  altísimas.  
    Continuar con la lista de los desmanes y tropelías cometidas desde que los KIrchner están en el poder representa un esfuerzo enorme de memoria. Son tantos y tan variados que se  necesitarían muchas horas para enunciar su totalidad.
    Solo me resta agregar para finalizar, que muy próximo al fin de mi vida, veo con gran tristeza el mundo que les dejo a mis nietos. Quisiera que la frustración que hoy vivimos que solo nos lleva  a descreer en las instituciones, finalice. Nuestro actual gobierno ceba el resentimiento, lo alienta y le da sustento. Ha descubierto cómo potenciar a su favor la desilusión, los agravios y la amargura desatados por los demagogos de la democracia que lo precedieron en el poder. En esa estrategia sin escrúpulos consiste su arte. El Gobierno ha rentado su padecimiento.. Ha compensado con sentimentalismo, clientelismo, maniqueísmo y mitología, un formidable vacío de identidad.
     Los políticos que forman la oposición conforman las parte desgajadas de un estructura ausente. Buscan reivindicar, en todo lo que emprenden, el valor de una unidad de la que no son expresión y producen la desesperación de quienes quieren confiar en ellos. No han sabido transformar, el relato de las desgracias que vivimos. No son persuasivos, de lo que aseguran combatir, mantienen el monologo, la fragmentación, el caudillismo y la vocación autoritaria. Ha llegado la hora que se produzca el verdadero cambio y solo la juventud no comprometida por el sistema podrá lograrlo en el futuro.
                                                                                                           Guillermo César Vadillo
 
  53403 visitantes (97342 clics a subpáginas)  
 
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis